lunes, 18 de junio de 2007

Asunto: Qué domingo Teté!

Los archivos pasan de un lado al otro según lo ordené. Igual me mata la ansiedad: me paró, arregló el mate, armo sillones y los deshago mientras la cuenta regresiva espera latente detrás de esta ventana. Cuando me vuelvo a sentar aún no defino si estoy apática o cansada. Mientras espero cruzamos miradas con el ñandú azul parado sobre el monitor. Nuestra relación se basa en una complicidad férrea y eso que nos conocemos hace menos de un día.
(Termina la primera tanda de porquerías, pero con qué criterio borrar lo acumulado con tanto esmero…) Ese fue uno de los temas de conversación apostados en la barra engrasada por las papas fritas en la dulce espera de Bochatón. Doblé en cuatro la entrada delicadamente y la puse en el bolsillo de atrás del jean. (Actualmente en remojo y con la entrada adentro)
Me acuerdo comentar a los gritos en pleno recital: “me lo llevaría para mi mesa de luz”, pero su carácter impertinente no me permitió doblarlo en cuatro. Tan bien que se iba a llevar con la mujer que baila desnuda en el frasco de aceitunas! Al frío de la calle le siguió un vino y una estufa donde apostarme. La música estaba tan fuerte que permitía decir cualquier barbaridad y que sonara alegre. Hay algo en la sentencia temprana que lleva al estado de rebeldía constante.
De vuelta a casa me meto en un auto gigante. Y con tanto sueño y alcohol que por momentos siento que me pasean en un cochecito de esos que tienen tres ruedas. El pelado me habla del gas y el país. Nota mi reticencia pero insiste aún cuando me ve cabecear constantemente. (Se va la segunda tanda. Encima me dio hambre, es feriado y por supuesto no hice las compras)
El sábado me desperté con el gasista. No fallo en una, a todos los prestadores de servicios para el hogar que necesité durante el año los recibí con el maquillaje corrido y la voz de Janis Joplin. Un clásico.
A eso de las doce, cuando se va Horacio mi nuevo padrino, escucho la voz de la vieja de arriba en el palier y me inunda una sensación de satisfacción inmensa. Sé que si me acusan de algún crimen ella estará ahí, firme junto al pueblo, declarando con su voz chirriante que la tragedia se venía venir, que era una mal educada, roba cable y que participaba del juego de olla con Norita. Está bueno tener enemigos tan surrealistas. (Tocate una de Pappo, vieja)
El resto del sábado deviene estrepitosamente. Una cosa lleva la otra y todo al calefactor. Para fin de la temporada invernal, voy a salir a los barrios con un show de contorsionismo. Quizás así pueda salir del confusionismo.
Ejercí el “hoy no salgo” histérico como debe ser, llevándolo hasta extremos insospechados. Salir sin maquillar, con cualquier remera y terminar poniéndose delineador en el baño de un bar con media pinta adentro. De ahí en más me la pase bailando o eso es lo que recuerdo. También pintó la creatividad meta graffitis en los parabrisas de los autos. Rock and roll nena!
El domingo me levanté con eso de “siempre hay un roto para un descocido…” en la cabeza. (Raro, suelo levantarme con una canción. Al rato apareció Bowie) O sea que si me levanto rota, alguien se descoció por mí? Grandes preguntas sin resolver.
Bueno, me voy a bajar las fotos del guiso de lentejas latinoamericano. Además como diría un amigo “Dejá de hacer post tan largos, si la gente tuviera ganas y tiempo de leer. Agarraría un libro”
Ayer te imaginé en un solitario ciber (con una lamparita colgando del techo sin aplique) suéter gris escote en v lleno de pelotitas (o debería decir escote en b: bien Cobain). Por favor, no agarres la shilette pa emprolijarlo. Me preocupo, sabelo.
Saludos a vos, el gerente y ese inglecito de porquería.
Laly

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Es tan difícil superar el hastío de un domingo y mucho más sabiendo que nos espera un lunes feriado, para colmo el frío y nunca falta la vecina chillona, que esperamos para vivir en una verdadera comunidad con la gente que realmente necesitamos....

Anónimo dijo...

mi abuela siempre me decía lo del roto para el descocido, y a mi se me descoce todo, la campera, el jean, las zapatillas y hasta el alma por momentos.

Anónimo dijo...

divertido tu domingo, por lo menos más que el mío. a ver cuándo amanecemos juntos, ja

Anónimo dijo...

Y yo ayer me imaginé colgada del techo,sin lamparita, con un solitario aplique... el de la gillette.
Debería preocuparme?.Me quedaría bien si me hiciera un escote en V "victorioso", a lo Cobain. But not yet my dearest, not yet.Aún visto prendas sintéticas (sin tetícas también, y sintetizadas gracias al servicio de lavadero que todo lo encoge, maldito!).
Sirve responder un viernes a una entrada del domingo?. Has visto la velocidad con la que corre la vida... maybe im amazed... as Macca said in a damn beautiful song.

Be awear of...
Gr Str.

Anónimo dijo...

yo fui testigo de todo todo todo.



y te extendí sonriente mi sobrecito con pinturitas cuando huiste a maquillarte al baño del bar.


Después no me acuerdo más...